Una chica de 13 años estuvo secuestrada alrededor de 10 horas, fue abusada –aunque no violada- y amenazada con ser llevada a la ciudad santafesina de Rosario para ser prostituida, según denunció su madre a NdR Radio FM 103.9.
La Trata, un execrable negocio ocultado por el poder.
El hecho, ocurrido el pasado 20 de noviembre en Mar de Ajó Norte, además incluye serias y sospechosas anomalías e irregularidades en la investigación policial, maltratos por parte de una psicóloga de Salud Mental pública y de un médico de la Policía con pasado magadanista, y hasta la progenitora involucra a una compañera de su hija como la entregadora al proxeneta, que estaría identificado como puntero político del oficialismo costero.
Pero la gravedad del episodio trasciende aún más lo previsible: la joven damnificada habría sido llevada, vendados sus ojos, a una especie de aguantadero sito en un complejo de apartamentos en el límite demarcatorio de las localidades de La Lucila y Costa Azul, donde el abusador residiría amparado por un integrante de la legislatura local, según admitió su madre. Los datos de todo lo antedicho y de filiación del proxeneta ya se encuentran en la Justicia, mientras que la fiscalía local ha determinado que este abusador, aún en libertad, está restringido de acercarse a cualquier integrante de la familia.
Oportunismo político.
En diálogo mantenido durante La Radio Ha Vivido Equivocada (LRHVE), la mamá de la adolescente -quien prefirió mantener en el anonimato los nombres de todas las personas involucradas y el propio por una cuestión de seguridad personal y jurídica- admitió que un alto dirigente macrista de la política costera y ex candidato a intendente en las últimas elecciones, le ofreció una supuesta ayuda que fue desechada de inmediato por la mujer, que lo acusó convenientemente de “especulador político”.
La madre de la joven secuestrada y abusada se acercó a NdR Radio FM 103.9 para denunciar lo sucedido.
Conservadurismo cultural y criminalización de la víctima.
La chica abusada –que apareció en su domicilio casi a la medianoche del 20 de noviembre pasado, en corpiño, con marcas en su cuerpo y despojada de algunas de sus prendas y pertenencias después de haber sido liberada por su captor-, junto a sus dos hermanos recibió desde ese momento instrucción escolar a domicilio, ya que por seguridad no asiste ninguno de ellos a las escuelas con normalidad. La joven es estudiante secundaria en la escuela 4 de San Bernardo, cuya directora se habría, en algún momento, negado a continuar con este proceso instructivo particular, porque se enteró que el hermano mayor de la chica abusada salió de su casa un día junto a unos amigos a pasear por el barrio.
En este cadena de gravedad y de anomalías y hasta de supuesta connivencia policial y política con aquellos integrantes de bandas de trata de personas, el episodio llegó hasta límites insospechados, ya que según lo declarado en LRHVE por la madre de la joven “muchos efectivos de la policía de Mar de Ajó me han tratado muy mal, hasta el punto de no querer tomarme la denuncia pertinente, primero, y de haber cambiado mi testimonio, después. Incluso tuve que soportar que el médico policial que entendió en el proceso verificatorio del estado de salud de mi hija me dijera con total impunidad que me ‘no exagerara, pues no había sido violada, y que a veces los chicos mienten mucho’. Es más, un policía hasta me expresó que ‘si la nena estaba vestida con ropa de color negro es factible que estos episodios de abuso ocurran’, como si el color de la ropa demonizara a la mujer y la convirtiera en una cualquiera”.
Por último, la mamá se mostró indignada por algunos comentarios de gente allegada que naturaliza estos aberrantes hechos y hasta llega a dudar de la actitud de la nena, quien aún hoy padece producto de lo vivido trastornos psicológicos importantes. “Parece increíble, pero los presos somos mis hijos y yo, y el abusador se halla en libertad. No voy a parar hasta que se haga justicia. Elevaré lo sucedido hasta las máximas instancias”, sentenció la mujer.