El consumo de carne vacuna por cápita es el más bajo de la última década, incluso un 3,4% menos que el año pasado. Con estos datos, cada habitante consume anualmente poco más de 50 kilos, según señalaron directivos de la Cámara de la Industria de la Carne.
En declive
En los últimos años, el consumo de los distintos cortes va descendiendo abruptamente, debido no sólo al aumento oneroso en sus precios sino también a un escandaloso descenso en el poder adquisitivo.