Malestar e incertidumbre son las sensaciones predominantes en los propietarios de viviendas de alquiler veraniego, ante la volubilidad en los mensajes y falta de definiciones oficiales con respecto a los protocolos a seguir para poder desarrollar la actividad. En tan sentido, se prevé que por este motivo, entre otros que hacen estrictamente a la realidad sanitaria, al menos el 50 por ciento de los inmuebles que habitualmente se encuentran en arrendamiento temporario, este verano no estará disponible para ser utilizados por el turismo.
Persianas bajas
Caso similar ocurriría con los locales comerciales, sobre todo en los cascos céntricos de las localidades costeras, que a días de la apertura del ingreso del turismo en general se ven cerrados y con escasas posibilidades de reapertura durante la temporada estival.