Después de las amenazas vertidas por el titular de Obras Públicas, Pablo Soto, un grupo de trabajadores comunales denunciaron irregularidades en el cobro de sus haberes en septiembre. Incluso, en algunos casos los sueldos ni siquiera fueron abonados aún.
Vale recordar que después de una movilización en reclamo de mejoras salariales y laborales, Soto declaró que quería saber los nombres de los trabajadores se hallaban “en la vereda de enfrente del gobierno” de Cristian Cardozo, por lo que conminó a sus subalternos a mantener “una charla amigable” con aquellos empleados a los que denominó “rebeldes”.