La presencia de roedores en la escuela 9 de Mar de Ajó prosigue provocando dificultades para el dictado de clases, a pesar del silencio y la complicidad de docentes, gremialistas y autoridades de la burocracia educativa.
El problema, que ya lleva un par de semanas, se extendió también al área aledaña al colegio, ya que se han divisado ratas en varias viviendas de la zona. Situación similar acontece en la escuela 10, que se halla ubicada a escasos metros de la primaria.
De terror
Vale recordar que, por esta aberrante realidad, varios estudiantes se contagiaron de leptospirosis y al menos una niña debió ser hospitalizada.