Miles de propietarios urbanos y rurales de la provincia de Buenos Aires deberán abonar en la cuota correspondiente a fin de año un adicional del impuesto inmobiliario que duplica lo que venían pagando por el gravamen.
Impacto local
Un ejemplo de la Costa Atlántica evidencia el impacto: un propietario que pagaba $66.008, recibió ahora una cuota final de $132.016,80.
A través del ente recaudatorio ARBA y a manera de excusa banal, el gobernador Axel Kicillof admitió que el incremento sólo deberán pagarlo aquellos dueños de inmuebles de alta valuación, aunque los datos al respecto son poco precisos.


























