Seis policías y un agente penitenciario fueron condenados a prisión efectiva tras comprobarse que desde 2009 a 2011 abusaron sexualmente de dos menores de edad en grave estado de vulnerabilidad.

Según lo determinado en el fallo judicial, los condenados retiraban a las menores de 13 y 14 años del Parque Lezama, en la ciudad de Buenos Aires, y las llevaban hasta el predio de la Policía Montada, donde las violaban reiteradamente bajo amenazas y haciendo prevalecer una supuesta relación de superioridad y por su condición de funcionarios públicos.