El puesto de chapa de pirotecnia que está obstaculizando todo el ancho de la vereda de Costanera casi en su bajada a playa de Hernández, en San Bernardo, fue habilitado por la comuna, la policía y los bomberos locales, según admitió su encargado –amigo personal del dueño- en charla durante el programa La Radio Ha Vivido Equivocada (LRHVE).
Venta de pirotecnia: connivencia política
Vladimir, tal el nombre del responsable del puesto, aseguró que “hoteleros y supermercadistas locales adquieren ‘la torta’”, el artefacto pirotécnico más caro que se expende en ese lugar y que cuesta “nueve mil pesos”. En tanto, en medio de ambigüedades retóricas, expresó que “la gente se divierte utilizando pirotecnia, aunque yo no la utilizo”. Consultado sobre si estaba de acuerdo con su uso, Vladimir, inmerso en sus contradicciones, dijo un escueto “está legalizado (sic)”.
Sobre los cientos de heridos que resultan cada año por el uso de estos elementos, el encargado de ese “sospechoso y connivente lugar” enclavado a metros del Parador Cultural manifestó que “es culpa de quienes no saben utilizarlos” (sic). A la vez, aseguró que “los cohetes se expenden con expresas medidas de seguridad en su envoltorio” (sic) y que “nunca tuvimos un inconveniente por accidente”, desconociendo, o pretendiendo hacerlo, los cientos de heridos que son víctimas, muchos de gravedad, por la manipulación de estos elementos absurdamente belicosos.
