Los responsables de boliches bailables insisten en realizar su actividad en espacios públicos al aire libre cercanos al mar, sin el servicio de barra, que sería reemplazado por mesas de hasta diez ocupantes, el uso de barbijo en lugares comunes y todo tipo de controles sanitarios.
Increíblemente, con visto bueno
El protocolo sería aprobado por el gobierno provincial y el sector podría reanudar su labor, bajo esta disparatada modalidad, el próximo 1 de diciembre. Además, las bebidas alcohólicas se expenderán sólo en botellas y los asistentes tendrán que reservar mesas con anterioridad, que deberán ser abonadas mediante la modalidad de pago electrónico.