El gobernador bonaerense encabezó la inauguración protocolar de la sede de la Escuela de Bellas Artes, en Mar de Ajó, en un evidente acto teñido por lo partidario.
Haciendo gala de un nuevo acto de proselitismo partidario y con obsoletas críticas principalmente destinadas al exgobierno de Mauricio Macri (sic), el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, inauguró ayer (miércoles 10) la sede de la oficialista Escuela Municipal de Bellas Artes, en Mar de Ajó.
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Acompañado por el intendente local, Juan De Jesús, y otros funcionarios provinciales y costeros, Kicillof encabezó el mitin kirchnerista sin ofrendar absolutamente nada interesante desde el discurso y recayó, como es costumbre, en la hipocresía del relato selectivo.