No podía ser de otra manera: los mediocres, sin ir más lejos, llegan lejos en este paraíso fiscal que es la provincia de Buenos Aires, también sin ir más lejos que la ciudad de La Plata. Quedó marcada, según la lotería electoral de octubre, como senadora de esta tierra bonaerense. Costera, bien costera. Con todas sus vericuetos, colectoras, recolectoras y reputísimas madres que han parido a estos crápulas con fueros y jubilación de privilegio, como ella, que es una inmensa radical de puro cepo magadanista y Macrista de pura cepa globoluda.
Ella, la Heidi vernácula, más cula que vernu. Ella, la del mar, del campo, del monte y de otros accidentes geográficos y siniestros politiqueros. La que le agradece a su abuelito Magadán por los servicios prestados y los vueltos cobrados.
Ella, la que votó en el recinto de senadores en favor del saqueo a los trabajadores y jubilados del Banco de la provincia de Buenos Aires. Ella, Flavia Delmonte, la Forra de la Semana.
¡Felicitaciones, Senadora!
Flavia Delmonte, la Heidi costera, que algún día le dirá a un jubilado de Banco de la Provincia de Buenos Aires: “Abuelito, dime tú”. Y él le responderá: “Sí, te digo yo: ¡andá a la puta que te parió!”.
