Un grupo de científicos occidentales vinculados al mercado de los laboratorios aconsejó el uso del barbijo una vez que culmine la pandemia por COVID, como forma de paliar socialmente futuras apariciones de otros virus. Como contrapartida, algunas voces más sensatas del mundo de la ciencia se oponen a esta perversa iniciativa, indicando que sería no sólo un atentado a las libertades individuales, sino un perjuicio sanitario.
Sin quórum
Hasta ahora no hubo resultados claros en los estudios que demuestren que el uso de tapabocas reduzca la transmisión, por ejemplo, de la gripe.