Mientras la mayoría de jubilados y pensionados perciben haberes de pobreza y se encuentran a la deriva en cuanto atención básica, la ANSeS organizó ayer en San Bernardo un banal espectáculo de música ligera destinada principalmente a la juventud.
La mediocridad como vara general
El evento llevado a cabo en un espacio abierto, y en que se exigió el absurdo y discriminatorio pase sanitario para ingresar, estuvo signado por la escasa participación de público. Al escenario subieron cantantes de trap, que entonaron melodías inmersas en la vacuidad musical y la grosería literaria.