Una nutrida concurrencia protestó en las primeras horas de la tarde de hoy (jueves 24) frente a las puertas del hotel céntrico sambernardino ubicado en la esquina de la avenida San Bernardo y Chiozza, en reclamo de justicia para las dos mujeres salvajemente agredidas por un empleado del lugar, quien cuenta con la complicidad y el amparo de la gerencia de la residencia eventual.
Joel Chávez, a quien ahora el gerente del hotel New Seaboard, Alfredo Ottaviani, dice que ha “apartado de sus tareas”, atacó en el interior del hotel donde trabaja (estaría en condiciones laborales irregulares, además) a dos mujeres el pasado viernes (17), en instancias que éstas iban a pedirle explicaciones por una denuncia falsa sobre maltrato animal, que el energúmeno agresor realizó a través de las redes sociales. Chávez respondió a los golpes y patadas, lastimando de gravedad a ambas. El mismo Chávez fue fotografiado, en una oportunidad, dándole de beber bebidas alcohólicas a un perro, en contraposición con su actitud declamatoria protectora y animalista.
Los medios brillaron por su ausencia
Durante la manifestación -en la que sólo se hizo presente NdR Radio como representante de los medios de comunicación locales- Ottaviani, el gerente del hotel, intentó mitigar y dividir la protesta, aunque no consiguió su perverso y ruin objetivo tras conversar con el hijo de la mujer agredida por su empleado. Es más: mañana (viernes 25), los manifestantes tienen previsto realizar una segundo encuentro a las puertas del hotel, a partir de las 14, hasta que la gerencia del mismo se digna a entregar el video interno con las imágenes registradas, que Ottaviani (vinculado al negocio del histriónico automovilismo que llaman deportivo) niega poseer.
Al grito de “sinvergüenza, caradura, cómplice de golpeadores y mentiroso”, la gente que se dio cita en la concentración prometió no cesar en su protesta hasta tanto no haya justicia con las mujeres damnificadas y el agresor pague por su accionar.
Insólita respuesta policial
Vale recordar que durante la emisión del miércoles (23) de La Radio Ha Vivido Equivocada, una allegada a las agredidas manifestó que en la Comisaría de la Mujer desestimaron tomarle la denuncia pertinente, aduciendo sospechosamente que “al no haber sido estas personas golpeadas por un familiar directo, era inviable certificar lo sucedido” (sic).
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